Es nuestra quinta Triumph desde que Iñaki confiara su Bonneville en nuestros comienzos para hacer de ella CRD#8 ¨Proyecto Bonie¨.
Aunque todas guardan similitudes, cada una de ellas tiene cosas únicas que las hacen diferente entre el resto. Y esto lo hace el propietario que está detrás de cada proyecto.
Todo empieza con conversaciones por e-mail, telefónicas y personales para conocer bien a la persona y tratar de hacer la moto a su gusto y semejanza.
Llegada a este punto Juan (propietario de esta última Triumph que viajará a Biarritz), se ve plénamente satisfecho con la estética que va cogiendo.
Bajando la suspensión delantera cinco centrímetros, cambiando llantas/neumáticos todo en negro, haciendo un suchasis nuevo, escapes artesanales por arriba, cambio de manillar y piñas, bomba de freno, filtros abiertos K&N, realojando el depósito de gasolina, etc... hemos dado con la estética que Juan soñaba.
Él no sabía si estaba sabiendo transmitir todo en sus correos. Pero otra vez más se ha logrado que hombre y máquina sean uno. Para CRD esto es un triunfo. Ver feliz y satisfecho a la persona que hay detrás es nuestro mejor premio.
Todavía falta por cambiar amortiguadores traseros por unos algo más cortos, hacer asiento y esconder toooodo el sistema eléctrico. Pero podemos decir que esto ya va sobre ruedas ;O)
3 comentarios:
Qué maravilla, no me extraña que su dueño esté feliz.
¡Me gusta, se ve musculosa!
Esta moto promete una conducción alegre !!!!!
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